Cuando llegue yo sobre las ocho menos diez ya estaban los hermanos Estrada y Rebollo con las bici metidas en el furgón, nada mas llegar y ni si quiera bajarme de la bici ya empiezan los vacileos sanos, menos mal que solo recuerdo el frió que hacia.
Mientas esperábamos a Roberto y Insu nos hacemos unas fotos para recordar que siempre alguien tiene que llegar tarde.
Cuando llega Rober nos dice que Insu no puede venir que ha pasado mala noche, pues nada Rebollo coge el furgón y para galapagar.
Cuando damos con el sitio y dejar recuerdos por las calles de Galapagar, llega el momento de aparcar y menos mal que tenias a nuestro amigo Rober pues casi rompemos la ley aparcando en las aceras.
De allí directos para recoger los dorsales y prepararnos para pasar un rato bueno de bici.